Las actividades artísticas y recreativas forman parte de la historia de la humanidad desde los tiempos más remotos y de la esencia del proceso de humanización. La educación artística es actividad necesaria para el desarrollo de la sensibilidad, la creatividad y la visión estética de la vida que, junto con la dimensión ética, contribuye a la formación de ciudadanos cultos, tolerantes y solidarios. Por ello, la finalidad de los centros de Enseñanzas Artísticas no solo consiste en conseguir de los alumnos una formación artística de calidad, sino también en conseguir el pleno desarrollo de su personalidad, garantizando así su futuro profesional y personal.